El evento «64 mil razones para no votar» fue una acción colectiva organizada por activistas cubanos en Madrid con el objetivo de expresar y difundir las razones para no participar en las elecciones convocadas por el Partido Comunista de Cuba (PCC) el 26 de marzo de 2023. Esta campaña se llevó a cabo la jornada previa a las votaciones, en la que se ratificaba a los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) nominados por la cúpula castrista a través de las comisiones de candidaturas.
Activistas cubanos en España hicieron un llamado a sus compatriotas, tanto dentro como fuera de la Isla, para que difundieran sus razones para no votar en lo que consideraban una «farsa electoral». La campaña «Cuba dice NO a la dictadura» invitó a los cubanos a participar escribiendo sus razones en publicaciones online o en sus perfiles de redes sociales. El mensaje fue claro: rechazar el sistema electoral del régimen cubano y apoyar a las familias en la isla que enfrentaban la coerción y las amenazas para votar.
Si bien en países donde existen alternativas políticas genuinas, la mejor estrategia democrática es fomentar una mayor participación en los procesos electorales. Sin embargo, en estados totalitarios donde la pluralidad política está criminalizada y todos los espacios de participación están cooptados por el Estado, la única alternativa que tienen los ciudadanos para expresar su disenso ante un sistema de votaciones sin opciones reales es no participar en él.
El colectivo en Madrid anunció una acción simbólica que tuvo lugar el sábado previo a las votaciones en Muelle 36, Calle Hilarión Eslava 36, 28015 Madrid. Entre las 4:00 PM y las 9:00 PM, los participantes construyeron un mural con las razones para no votar, dando voz a la protesta y la resistencia pacífica. Esta actividad incluyó la interpretación de la obra «Coro» de Tania Bruguera y Luis Alberto Mariño, añadiendo una dimensión artística y cultural a la manifestación.
«64.000 razones para NO votar» formó parte de una campaña internacional impulsada por activistas cubanos en el exilio, junto con agrupaciones políticas y organizaciones de la sociedad civil dentro de Cuba. La iniciativa comenzó en noviembre, durante las votaciones a delegados a la Asamblea Municipal del Poder Popular, y cobró mayor fuerza de cara a las elecciones nacionales. La campaña por la abstención buscaba contrarrestar la propaganda del régimen, que intentaba legitimarse a través de altas tasas de participación electoral.
El régimen cubano había calificado las «elecciones municipales» de noviembre de 2022 como trascendentales, aunque solo el 68% de los convocados acudió a votar, y un porcentaje significativo de las boletas fueron en blanco o anuladas. Según una encuesta de Cubadata, más del 73% de los cubanos consideraban que el sistema electoral de Cuba no era legítimo ni justo, y un 36,5% contemplaba la opción de la abstención en las votaciones nacionales.
«64.000 razones para NO votar» se consolidó como un esfuerzo para visibilizar el descontento y promover la abstención como forma de protesta, en un contexto donde los 470 candidatos a la Asamblea Nacional eran igual número a los escaños disponibles, demostrando la falta de elección real en los comicios cubanos. La iniciativa buscó que la ausencia en las urnas fuera la voz de la protesta, reforzando el mensaje de que los cubanos no se dejaría manipular por un sistema que más que elegir solo les ofrece la opción de ratificar.
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